Si alguna vez nos detuviéramos a pensar en el pasado, para así mejorar el presente podríamos asfaltar mejor un futuro hipotecado por errores, caprichos y mentiras las que de una u otra manera, mas temprano que tarde llegaran con la boleta de nuestras truncadas decisiones. Como Dioses en stand by tenemos en nuestras manos el ser mas poderosos que Odín, Anubis o Quetzlcoatl. La espada del éxito y el estandarte de la tranquilidad yacen frente a nuestra puerta, reluciendo su asombroso poder, esperando que dejemos atrás y para siempre la neblina de obstinación que muchas veces nos detiene y nos hace dudar de su efectividad, e impide que aceptemos nuestra verdadera identidad, Dioses en potencia más poderosos que cualquiera descrito por la mitología mas asombrosa.
¿Qué nos detiene para dar el “paso de fe” y usarlos?
Nosotros mismos.


No hay comentarios:
Publicar un comentario